Cincuenta y siete músculos hacen de nuestra cara algo único. Su forma y su apariencia dependen directamente del tono de los músculos faciales. Por lo que la cara, como el cuerpo, necesita movimiento y entrenamiento. Pero encontrar el modo de tratar individualmente cada músculo de la cara no es fácil. Por lo tanto, necesitamos hacerlo de una manera global y consciente.

Con la edad los músculos faciales se exponen a la hipertonía, un proceso patológico que, al aumentar el tono muscular en comparación con su estado natural, produce deterioro de las circulaciones sanguínea y linfática, aparición de pliegues y arrugas, pérdida de simetría y cambios en el contorno de la cara. Como resultado, los rasgos faciales comienzan a desdibujarse gradualmente.

Pero los músculos no tienen edad. Nuestro cuerpo está diseñado con la capacidad para rehabilitarse, a los treinta años y a los sesenta, también. Luchar contra la hipertonía y conseguir cambios en nuestra apariencia está en nuestra manos realizando ejercicios específicos para el cuerpo, la cara y el cuello. Y podemos conseguirlo con éxito con la ayuda de Patakara, el sorprendente y extraordinario invento del doctor japonés Akihiro Yoshiaki. Patakara es un método seguro e indoloro que trabaja contra las causas del envejecimiento facial y ofrece resultados estables y duraderos, comparables con los métodos quirúrgicos y sin ninguno de sus inconvenientes.

Especialmente diseñado para la tonificación, de manera natural, de los músculos de la cara y el cuello, Patakara ayuda a lograr cambios estéticos sin necesidad de intervención invasiva alguna. La aplicación simple y específica de este pequeño entrenador facial hace de él un producto innovador en el mercado mundial: salud, efectos cosméticos y un maravilloso estado de ánimo con tan sólo quince minutos al día.

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